42 Versículo de la Biblia sobre un esposo infiel

“Mas el que comete adulterio es falto de entendimientoCorrompe su alma el que tal hace”

— Proverbios 6:32

Proverbios 6:32 dice: “El que comete adulterio carece de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace.” Este versículo subraya la insensatez y el daño espiritual que conlleva la infidelidad. Al involucrarse en el adulterio, un esposo no solo traiciona a su pareja, sino que también se perjudica a sí mismo moral y espiritualmente. La infidelidad es vista como una falta de juicio y una acción que puede devastar tanto a la familia como a la propia integridad del individuo.

“Honroso sea en todos el matrimonio, el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios a los adúlteros los juzgará Dios”

— Hebreos 13:4

Hebreos 13:4 dice: “Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios”. Este versículo destaca la importancia de la fidelidad en el matrimonio, subrayando que el compromiso matrimonial debe ser respetado y mantenido puro. Un esposo infiel rompe este pacto sagrado, y según el versículo, Dios juzgará a quienes cometen adulterio. La fidelidad es fundamental para mantener la santidad y el honor en la relación matrimonial.

“No cometerás adulterio”

— Éxodo 20:14

Éxodo 20:14 dice: “No cometerás adulterio”. Este mandamiento subraya la importancia de la fidelidad en el matrimonio, destacando el compromiso y la confianza mutua como pilares fundamentales de la relación conyugal. En el contexto de un esposo infiel, este versículo llama a reflexionar sobre las consecuencias del adulterio, no solo en términos de daño emocional y espiritual, sino también como una transgresión de los valores y principios que sustentan una unión sagrada ante Dios.

“Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón”

— Mateo 5:28

Mateo 5:28 dice: “Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla ya ha cometido adulterio con ella en su corazón”. Este versículo enfatiza la importancia de la pureza de pensamiento y la fidelidad en el matrimonio. Jesús enseña que la infidelidad no es solo un acto físico, sino también un asunto del corazón y la mente. Incluso el deseo lujurioso es considerado adulterio, destacando la necesidad de mantener pensamientos y acciones en línea con los valores de amor y lealtad hacia el cónyuge.

“Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”

— 1 Corintios 6:18

1 Corintios 6:18 advierte sobre los peligros de la inmoralidad sexual, destacando que este pecado afecta profundamente al cuerpo y al espíritu. En el contexto de un esposo infiel, el versículo subraya la gravedad de la infidelidad no solo como una traición a la pareja, sino también como un daño a uno mismo. La infidelidad rompe la unión sagrada del matrimonio y deshonra el compromiso ante Dios, llamando a la reflexión y al arrepentimiento para restaurar la integridad personal y la relación conyugal.

“Sea bendito tu manantialY alégrate con la mujer de tu juventudComo cierva amada graciosa gacelaSus caricias te satisfagan en todo tiempoY en su amor recréate siempre”

— Proverbios 5:18-19

Proverbios 5:18-19 exhorta a los esposos a encontrar satisfacción y alegría en su propia esposa, sugiriendo que la fidelidad es fundamental para un matrimonio bendecido. El versículo resalta la importancia de valorar y deleitarse en la pareja, sugiriendo que la infidelidad lleva al sufrimiento y al caos. Al centrarse en el amor y el compromiso dentro del matrimonio, se puede construir una relación sólida y duradera, alineándose con los principios divinos de fidelidad y respeto mutuo.

“¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu? ¿por qué uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, no seáis desleales para con la mujer de vuestra juventud. Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, no seáis desleales”

— Malaquías 2:15-16

Malaquías 2:15-16 aborda la fidelidad en el matrimonio, subrayando la importancia de mantener un pacto sagrado. Dios enfatiza que el matrimonio debe ser un reflejo de Su amor y fidelidad, y repudia el divorcio y la traición. Un esposo infiel rompe este pacto, causando dolor y deshonra. Este pasaje llama a la reflexión sobre el compromiso y la responsabilidad en la relación matrimonial, instando a los esposos a ser leales y amorosos, reflejando el carácter de Dios en sus acciones.

“No se aparte tu corazón a sus caminosNo yerres en sus veredasPorque a muchos ha hecho caer heridosY aun los más fuertes han sido muertos por ellaCamino al Seol es su casaQue conduce a las cámaras de la muerte”

— Proverbios 7:25-27

Proverbios 7:25-27 advierte sobre las consecuencias de la infidelidad y el peligro de sucumbir a la seducción. Este pasaje describe cómo un camino de engaño y tentación puede llevar a la ruina personal y espiritual. Se utiliza la figura de una mujer seductora para simbolizar la atracción del pecado, advirtiendo que seguir estos impulsos destructivos puede resultar en la pérdida de la integridad y la vida espiritual. Es un llamado a la fidelidad y a resistir las tentaciones que amenazan el matrimonio y la moral personal.

“Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad honor; no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios”

— 1 Tesalonicenses 4:3-5

1 Tesalonicenses 4:3-5 destaca la voluntad de Dios para los creyentes: la santificación y la pureza sexual. Este pasaje insta a evitar la inmoralidad sexual y a controlar el propio cuerpo en santidad y honor. En el contexto de un esposo infiel, este versículo recuerda la importancia del compromiso y la fidelidad en el matrimonio. La infidelidad no solo daña la relación conyugal, sino que también va en contra de los principios de santidad y respeto que Dios desea para sus seguidores.

“Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, se entregó a sí mismo por ella”

— Efesios 5:25

Efesios 5:25 dice: “Maridos, amad a vuestras esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó a sí mismo por ella.” Este versículo establece un estándar elevado para los esposos, al instarlos a amar a sus esposas con el mismo sacrificio y devoción que Cristo mostró por la iglesia. En el contexto de la infidelidad, este versículo es un llamado a la fidelidad y al compromiso incondicional, recordando a los esposos que el verdadero amor implica entrega y respeto profundo hacia la pareja.

“Maridos, amad a vuestras mujeres, no seáis ásperos con ellas”

— Colosenses 3:19

Colosenses 3:19 dice: “Maridos, amad a vuestras esposas y no seáis ásperos con ellas.” Este versículo enfatiza la importancia del amor y el respeto en el matrimonio. En el contexto de un esposo infiel, este pasaje recuerda la responsabilidad de tratar a la esposa con amor genuino y consideración, evitando la dureza y el maltrato. La infidelidad contradice este mandato, ya que daña la confianza y el vínculo matrimonial. El versículo llama a los esposos a reflexionar sobre su conducta y a cultivar una relación basada en el amor sincero y el respeto mutuo.

“Bebe el agua de tu misma cisternaY los raudales de tu propio pozo¿Se derramarán tus fuentes por las callesY tus corrientes de aguas por las plazas?Sean para ti soloY no para los extraños contigo”

— Proverbios 5:15-17

Proverbios 5:15-17 aconseja la fidelidad en el matrimonio, utilizando la metáfora del agua para ilustrar la exclusividad y pureza de la relación conyugal. Se exhorta a los esposos a encontrar satisfacción y alegría solo con su pareja legítima, evitando así la infidelidad y las relaciones extramatrimoniales. Este pasaje subraya la importancia de cultivar un vínculo íntimo y comprometido con el cónyuge, resaltando que la fidelidad trae bienestar y estabilidad a la relación matrimonial.

“Pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, cada una tenga su propio marido”

— 1 Corintios 7:2

1 Corintios 7:2 aconseja a los creyentes casarse para evitar la inmoralidad sexual, sugiriendo que cada hombre debe tener su propia esposa y cada mujer su propio esposo. Este versículo subraya la importancia de la fidelidad en el matrimonio como un medio de proteger la santidad y el compromiso mutuo. En el contexto de un esposo infiel, el versículo resalta la necesidad de adherirse a los valores matrimoniales y de buscar soluciones que promuevan la integridad y el respeto dentro de la relación conyugal.

“Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios”

— Gálatas 5:19-21

Gálatas 5:19-21 enumera las “obras de la carne”, destacando comportamientos que alejan a las personas de la vida espiritual y de la comunidad cristiana. En el contexto de un esposo infiel, este pasaje subraya cómo la infidelidad se alinea con actos como la inmoralidad sexual y la falta de integridad. La infidelidad no solo daña la relación de pareja, sino también la relación con Dios, quien llama a la fidelidad y al amor genuino. Este versículo invita a reflexionar sobre la necesidad de arrepentimiento y renovación espiritual.

“La mujer virtuosa es corona de su maridoMas la mala, como carcoma en sus huesos”

— Proverbios 12:4

Proverbios 12:4 dice: “La mujer virtuosa es corona de su marido; pero la mala, como carcoma en sus huesos.” Este versículo destaca la importancia de una esposa virtuosa y fiel, comparándola con una corona que honra a su esposo. En contraste, una esposa infiel o de malas acciones es como una carcoma que destruye desde dentro. El mensaje subraya el impacto profundo que el carácter y la fidelidad de una esposa tienen en la vida y bienestar de su esposo, promoviendo la lealtad y el respeto mutuo en el matrimonio.

“Así es el que se llega a la mujer de su prójimoNo quedará impune ninguno que la tocare”

— Proverbios 6:29

Proverbios 6:29 advierte sobre las consecuencias de la infidelidad. El versículo destaca que quien se involucra con la esposa de otro hombre no quedará impune. En el contexto de un esposo infiel, este versículo subraya el daño y las repercusiones inevitables de romper los votos matrimoniales. La infidelidad no solo afecta la relación conyugal, sino que también trae problemas personales y sociales. La sabiduría bíblica enfatiza la importancia de la fidelidad y las consecuencias de ignorar estos principios morales.

“Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre”

— Mateo 19:6

El versículo Mateo 19:6 dice: “Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre”. Este pasaje enfatiza la santidad y unión del matrimonio, recordando que es una alianza sagrada establecida por Dios. En el contexto de un esposo infiel, este versículo resalta la importancia de la fidelidad y el compromiso mutuo. La infidelidad rompe esta unidad divina, y este versículo llama a respetar y preservar la integridad del vínculo matrimonial.

“El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, asimismo la mujer con el marido”

— 1 Corintios 7:3

1 Corintios 7:3 dice: “El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido”. Este versículo enfatiza la importancia de la fidelidad y el compromiso mutuo en el matrimonio. En el contexto de un esposo infiel, este pasaje recuerda la responsabilidad de ambos cónyuges de satisfacer emocional y físicamente a su pareja. La infidelidad se opone al mandato de amor y dedicación que se espera en una relación matrimonial según las enseñanzas bíblicas.

“Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero la adúltera indefectiblemente serán muertos”

— Levítico 20:10

Leviticus 20:10 trata sobre las consecuencias de la infidelidad en el contexto de la ley mosaica. El versículo establece que tanto el hombre como la mujer sorprendidos en adulterio debían ser castigados con la muerte, reflejando la gravedad con que se veía esta transgresión en la sociedad israelita antigua. Este texto subraya la importancia de la fidelidad matrimonial y busca preservar la santidad del matrimonio. En la actualidad, se interpreta como un llamado a la lealtad y al compromiso dentro del matrimonio.

“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo”

— 1 Pedro 3:7

1 Pedro 3:7 aconseja a los esposos a vivir con sus esposas con comprensión y respeto, reconociéndolas como compañeras en la gracia de la vida. En el contexto de un esposo infiel, este versículo resalta la importancia de la empatía, el respeto mutuo y el trato justo en el matrimonio. La infidelidad contradice estos principios, ya que socava la confianza y el respeto esenciales para una relación saludable. Los esposos deben esforzarse por cultivar un vínculo basado en el amor y la consideración mutua.

“Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñasPorque nuestras viñas están en cierne”

— Cantares 2:15

Cantar de los Cantares 2:15 dice: “Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas, pues nuestras viñas están en cierne.” Este versículo puede interpretarse en el contexto de una relación matrimonial como un llamado a identificar y abordar los pequeños problemas o “zorras” que pueden dañar la relación. Enfrentar la infidelidad requiere atención a estas “zorras”, las pequeñas tentaciones o descuidos que, si no se manejan, pueden destruir la confianza y el amor en el matrimonio.

“Porque los labios de la mujer extraña destilan mielY su paladar es más blando que el aceiteMas su fin es amargo como el ajenjoAgudo como espada de dos filos”

— Proverbios 5:3-4

Proverbios 5:3-4 advierte sobre los peligros de la infidelidad. Describe cómo las palabras de una mujer adúltera pueden parecer dulces y atractivas al principio, comparadas con miel y aceite suave. Sin embargo, el versículo advierte que al final son amargas como el ajenjo y agudas como una espada de dos filos. Este pasaje sirve como recordatorio para los esposos de las consecuencias destructivas de la infidelidad, instándolos a ser fieles y sabios en sus decisiones.

“Sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte”

— Santiago 1:14-15

El versículo de Santiago 1:14-15 nos enseña que cada persona es tentada por sus propios deseos, y cuando estos deseos se conciben, dan lugar al pecado. En el contexto de un esposo infiel, estos versículos subrayan que la infidelidad comienza en el corazón y la mente, cuando los deseos no se controlan. La infidelidad es una manifestación de ceder a la tentación, lo que finalmente lleva a consecuencias dolorosas y destructivas, tanto para el individuo como para la relación matrimonial.

“Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio”

— Mateo 5:27

Mateo 5:27 dice: “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio.” Este versículo forma parte del Sermón del Monte, donde Jesús amplía la comprensión de la ley moral. En el contexto de un esposo infiel, este versículo subraya la importancia de la fidelidad y el compromiso en el matrimonio. Jesús no solo condena el acto físico del adulterio, sino que también enfatiza la pureza del corazón y la mente, llamando a sus seguidores a cultivar relaciones basadas en el amor y la integridad.

“Si fue mi corazón engañado acerca de mujerY si estuve acechando a la puerta de mi prójimoMuela para otro mi mujerY sobre ella otros se encorvenPorque es maldad iniquidadQue han de castigar los juecesPorque es fuego que devoraría hasta el AbadónY consumiría toda mi hacienda”

— Job 31:9-12

El pasaje de Job 31:9-12 aborda el tema de la infidelidad conyugal desde la perspectiva de Job, quien se defiende de acusaciones y reflexiona sobre la gravedad de tal pecado. Job reconoce que la infidelidad es un fuego que consume y destruye, no solo afectando a la relación matrimonial, sino también a la integridad del individuo. Este versículo resalta la importancia de la fidelidad en el matrimonio y las consecuencias devastadoras de traicionar ese compromiso sagrado.

“Pero fornicación toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos”

— Efesios 5:3

Efesios 5:3 nos exhorta a evitar la inmoralidad sexual, la impureza y la codicia, destacando la importancia de vivir una vida santa y pura. En el contexto de un esposo infiel, este versículo subraya la gravedad del adulterio y la traición, recordando que tales acciones no son apropiadas para aquellos que desean seguir a Cristo. La fidelidad y la pureza son esenciales en el matrimonio, y este llamado nos invita a reflexionar sobre nuestras acciones y a buscar una vida que honre a Dios y a nuestra pareja.

“No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar”

— 1 Corintios 10:13

1 Corintios 10:13 nos recuerda que Dios es fiel y no permitirá que enfrentemos tentaciones más allá de lo que podemos soportar. En el contexto de un esposo infiel, este versículo ofrece consuelo y esperanza, asegurando que, aunque la situación sea difícil, Dios proporcionará la fuerza necesaria para superarla. Además, promete una vía de escape, guiando a la persona afectada hacia la sanación y la restauración, siempre bajo Su amor y cuidado.

“Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado”

— Isaías 54:5

Isaías 54:5 dice: “Porque tu esposo es tu Hacedor; el Señor Todopoderoso es su nombre”. Este versículo resalta la relación íntima entre Dios e Israel, presentando a Dios como un esposo fiel que provee y protege. En el contexto de un esposo humano infiel, este pasaje ofrece consuelo y esperanza, recordando que Dios es el verdadero y constante compañero. Aunque las relaciones terrenales pueden fallar, el amor y la fidelidad de Dios permanecen inmutables.

“Porque la mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras este vive; pero si el marido muere, ella queda libre de la ley del marido. Así que, si en vida del marido se uniere a otro varón, será llamada adúltera; pero si su marido muriere, es libre de esa ley, de tal manera que si se uniere a otro marido, no será adúltera”

— Romanos 7:2-3

Romanos 7:2-3 aborda el compromiso del matrimonio y cómo la ley vincula a una mujer con su esposo mientras él vive. Si él muere, ella queda libre de esa ley. Sin embargo, si está con otro hombre mientras su esposo vive, es llamada adúltera. Este pasaje subraya la seriedad del pacto matrimonial, pero también sugiere que la muerte libera del vínculo legal, simbolizando que la infidelidad rompe el propósito de la unión sagrada establecida por Dios.

“Serás librado de la mujer extrañaDe la ajena que halaga con sus palabrasLa cual abandona al compañero de su juventudY se olvida del pacto de su DiosPor lo cual su casa está inclinada a la muerteY sus veredas hacia los muertosTodos los que a ella se lleguen, no volveránNi seguirán otra vez los senderos de la vida”

— Proverbios 2:16-19

Proverbios 2:16-19 advierte sobre los peligros de la infidelidad y la seducción. Este pasaje describe cómo la sabiduría puede protegernos de relaciones destructivas, específicamente de una figura que se aleja de los compromisos sagrados del matrimonio. Un esposo infiel se desvía del camino de la rectitud, poniendo en riesgo su vida espiritual y emocional. La enseñanza resalta la importancia de la fidelidad y la sabiduría para mantener relaciones sanas y evitar las consecuencias negativas de la infidelidad.

“Me dijo otra vez Jehová: Ve, ama a una mujer amada de su compañero, aunque adúltera, como el amor de Jehová para con los hijos de Israel, los cuales miran a dioses ajenos, aman tortas de pasas”

— Oseas 3:1

Oseas 3:1 describe cómo Dios instruye a Oseas para que ame a su esposa, Gomer, a pesar de su infidelidad. Este acto simboliza el amor inquebrantable de Dios por Israel, a pesar de su idolatría y traición. El versículo resalta el tema del perdón y la redención, mostrando que el amor verdadero perdura incluso frente a la infidelidad. Es un poderoso recordatorio de la gracia divina y de cómo los compromisos genuinos pueden superar las pruebas más difíciles.

“El corazón de su marido está en ella confiadoY no carecerá de ganancias”

— Proverbios 31:11

Proverbios 31:11 dice: “El corazón de su marido está en ella confiado, y no carecerá de ganancias”. Este versículo resalta la confianza que un esposo tiene en su esposa, sugiriendo una relación basada en la fidelidad y la confianza mutua. En el contexto de un esposo infiel, este versículo invita a reflexionar sobre la importancia de la confianza y la integridad en el matrimonio. Una relación sólida y fiel es fundamental para evitar la pérdida emocional y espiritual que la infidelidad puede causar.

“El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor”

— 1 Corintios 13:4-5

1 Corintios 13:4-5 describe el amor verdadero como paciente, bondadoso y libre de envidia o arrogancia. En el contexto de un esposo infiel, este versículo nos recuerda que el amor genuino no busca su propio interés ni se irrita fácilmente. Aunque la infidelidad hiere profundamente, este pasaje nos invita a reflexionar sobre la naturaleza del amor que Dios desea para nosotros: uno que perdona, busca la reconciliación y se esfuerza por sanar las relaciones dañadas.

“Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar”

— 1 Timoteo 3:2

1 Timoteo 3:2 establece que un líder debe ser “irreprochable, esposo de una sola mujer”. Este versículo enfatiza la importancia de la fidelidad y la integridad en el matrimonio, especialmente para aquellos en posiciones de liderazgo espiritual. Un esposo infiel contradice este estándar, afectando su relación con Dios, su pareja y su comunidad. La fidelidad refleja el compromiso y el amor verdadero, y es esencial para construir una base sólida en el matrimonio y en la vida espiritual.

“El que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía”

— Tito 1:6

Tito 1:6 establece que un líder en la iglesia debe ser irreprochable y fiel a su esposa. Este versículo resalta la importancia de la fidelidad conyugal como un requisito para quienes desean servir en posiciones de liderazgo espiritual. En el contexto de un esposo infiel, el versículo subraya que la fidelidad es un valor esencial no solo en la vida personal, sino también para mantener la integridad y el ejemplo dentro de la comunidad de fe.

“Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazoPorque fuerte es como la muerte el amorDuros como el Seol los celosSus brasas, brasas de fuego, fuerte llamaLas muchas aguas no podrán apagar el amorNi lo ahogarán los ríosSi diese el hombre todos los bienes de su casa por este amorDe cierto lo menospreciarían”

— Cantares 8:6-7

El Cantar de los Cantares 8:6-7 habla de la fuerza y la profundidad del amor verdadero, comparándolo con el fuego y el agua. En el contexto de un esposo infiel, este pasaje resalta lo valioso y poderoso que es el amor genuino, sugiriendo que el amor verdadero es inquebrantable y no puede ser comprado ni destruido. Invita a reflexionar sobre la importancia de la fidelidad y el compromiso en una relación, recordando que el amor auténtico supera cualquier adversidad.

“Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, no yo, sino el Señor: Que la mujer no se separe del marido; si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; que el marido no abandone a su mujer”

— 1 Corintios 7:10-11

1 Corintios 7:10-11 aborda el tema del matrimonio y la separación. En estos versículos, el apóstol Pablo instruye a las esposas a no separarse de sus maridos y a los maridos a no abandonar a sus esposas. Aunque no se menciona directamente la infidelidad, el pasaje subraya el compromiso y la reconciliación en el matrimonio. Para una situación de infidelidad, estos versículos pueden invitar a la reflexión sobre el perdón y el esfuerzo por restaurar la relación, siempre guiados por los principios del amor y la fidelidad.

“Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti la mujer de tu juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, la mujer de tu pacto”

— Malaquías 2:14

Malaquías 2:14 aborda la infidelidad dentro del matrimonio, destacando la importancia del compromiso y la fidelidad. En este versículo, Dios confronta a los esposos que han sido desleales a sus esposas, recordándoles que el matrimonio es un pacto sagrado ante Dios. La infidelidad no solo traiciona a la pareja, sino que también deshonra el compromiso espiritual hecho delante de Dios. Este versículo subraya la gravedad de la traición y la necesidad de respeto y fidelidad en la relación matrimonial.

“Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo”

— Romanos 13:9

Romanos 13:9 resume los mandamientos en la ley del amor: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. En el contexto de un esposo infiel, este versículo resalta la importancia de la fidelidad como parte del amor genuino. La infidelidad va en contra de amar auténticamente, ya que el amor verdadero implica respeto, compromiso y honestidad. Al amar a su pareja como a sí mismo, un esposo debería evitar acciones que causen daño o traición, buscando siempre el bienestar mutuo.

“Fosa profunda es la boca de la mujer extrañaAquel contra el cual Jehová estuviere airado caerá en ella”

— Proverbios 22:14

Proverbios 22:14 dice: “Fosa profunda es la boca de las mujeres extrañas; aquel contra quien el Señor esté airado caerá en ella.” Este versículo advierte sobre el peligro de la infidelidad y las consecuencias de caer en la tentación de relaciones ilícitas. La metáfora de la “fosa profunda” sugiere que involucrarse con personas fuera del matrimonio puede llevar a la perdición y al juicio divino. Es un llamado a la fidelidad y a buscar la sabiduría de Dios para evitar el pecado.

“No hay otro mayor que yo en esta casa, ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, pecaría contra Dios?”

— Génesis 39:9

Génesis 39:9 relata una parte de la historia de José en Egipto, quien rechaza las propuestas de la esposa de Potifar diciendo: “¿Cómo podría yo hacer tan grande mal y pecar contra Dios?” Este versículo subraya la importancia de la fidelidad y la integridad, incluso en situaciones tentadoras. Para un esposo, este pasaje resalta la necesidad de honrar sus compromisos matrimoniales y ser fiel no solo a su pareja, sino también a sus principios y a Dios.