41 Versículos de la Biblia sobre enemigos derrotados

“Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, por siete caminos huirán de delante de ti”

— Deuteronomio 28:7

Deuteronomio 28:7 es un poderoso recordatorio de la protección y victoria que Dios promete a su pueblo frente a sus enemigos. Este versículo asegura que, aunque los enemigos ataquen, serán derrotados y huirán en desbandada. Refleja la fidelidad de Dios y su compromiso de cuidar a quienes confían en Él, garantizando que sus adversarios no prevalecerán. Es un mensaje de esperanza y fortaleza para quienes enfrentan desafíos, subrayando la certeza de la ayuda divina en tiempos de conflicto.

“El Dios que venga mis agraviosY somete pueblos debajo de mí”

— Salmos 18:47

El Salmo 18:47 destaca el poder de Dios para otorgar victoria sobre los enemigos. En este versículo, David expresa su gratitud hacia Dios, quien lo ha capacitado para superar a sus adversarios. El tema central es la confianza en la justicia divina y el reconocimiento de que el triunfo sobre los enemigos no es solo resultado de la habilidad personal, sino de la intervención y respaldo de Dios. Este versículo inspira a confiar en que Dios nos ayudará a vencer las adversidades y oposiciones que enfrentamos.

“Jehová peleará por vosotros, vosotros estaréis tranquilos”

— Éxodo 14:14

Éxodo 14:14 dice: “El Señor peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos”. Este versículo ofrece consuelo y esperanza, recordándonos que no estamos solos en nuestras luchas. En el contexto de los enemigos derrotados, resalta la idea de que la verdadera victoria proviene de la intervención divina. Nos invita a tener fe y a confiar en que Dios es quien combate por nosotros, permitiéndonos encontrar paz y serenidad en medio de las adversidades.

“Por medio de ti sacudiremos a nuestros enemigosEn tu nombre hollaremos a nuestros adversarios”

— Salmos 44:5

El versículo de Salmos 44:5 dice: “Con tu ayuda rechazamos a nuestros enemigos, en tu nombre pisoteamos a nuestros agresores.” Este pasaje refleja la confianza del salmista en el poder de Dios para vencer a los adversarios. Destaca la dependencia en la fuerza divina para triunfar sobre las dificultades y enemigos. Para aquellos que enfrentan desafíos, el versículo sirve como un recordatorio de que no están solos y que, con la ayuda de Dios, pueden superar cualquier obstáculo y experimentar la victoria.

“No habrá para qué peleéis vosotros en este caso; paraos, estad quietos, ved la salvación de Jehová con vosotros. Oh Judá Jerusalén, no temáis ni desmayéis; salid mañana contra ellos, porque Jehová estará con vosotros”

— 2 Crónicas 20:17

2 Crónicas 20:17 dice: “No habrá para qué peleéis vosotros en este caso; paraos, estad quietos, y ved la salvación de Jehová con vosotros.” Este versículo enfatiza la confianza en la intervención divina frente a los enemigos. En el contexto de una inminente batalla, Dios asegura al pueblo de Judá que no necesitan luchar, sino que deben tener fe y presenciar cómo Él derrota a sus enemigos. Es un poderoso recordatorio de que, a veces, la victoria viene de confiar y dejar que Dios actúe en nuestras batallas.

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”

— Isaías 54:17

Isaías 54:17 es un poderoso recordatorio de la protección divina contra las adversidades y los enemigos. El versículo asegura que ninguna arma forjada contra nosotros prosperará, enfatizando la victoria y el resguardo que Dios ofrece a sus fieles. En el contexto de “enemigos derrotados”, este pasaje nos da confianza en que, aunque enfrentemos oposiciones y desafíos, la justicia y la defensa de Dios prevalecerán. Es un llamado a la fe y a confiar en la protección divina ante cualquier adversidad.

“Cuando los caminos del hombre son agradables a JehováAun a sus enemigos hace estar en paz con él”

— Proverbios 16:7

Proverbios 16:7 dice: “Cuando los caminos del hombre son agradables al Señor, aun a sus enemigos hace estar en paz con él”. Este versículo destaca cómo vivir de acuerdo con la voluntad de Dios puede transformar las relaciones adversas. Al agradar al Señor con nuestras acciones y decisiones, incluso aquellos que se oponen a nosotros pueden ser llevados a la reconciliación o a la paz. Es un recordatorio del poder de la rectitud y la influencia positiva de una vida centrada en Dios.

“Todas las naciones me rodearonMas en el nombre de Jehová yo las destruiré”

— Salmos 118:10

El versículo de Salmo 118:10 dice: “Todas las naciones me rodearon; en el nombre del Señor, ciertamente las destruí”. Este versículo refleja una profunda confianza en la protección y el poder de Dios frente a los enemigos. A pesar de estar rodeado por adversarios, el salmista declara que, con la ayuda divina, ha logrado vencerlos. Este pasaje resalta el tema de la victoria sobre los enemigos y la fe inquebrantable en que Dios es quien otorga el triunfo sobre cualquier adversidad.

“¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?”

— Romanos 8:31

Romanos 8:31 dice: “¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?”. Este versículo ofrece una poderosa afirmación de la protección y el apoyo divino. En el contexto de enemigos derrotados, sugiere que con Dios de nuestro lado, ninguna oposición puede prevalecer. Es un recordatorio de que, aunque enfrentemos adversidades y enemigos, la presencia y el poder de Dios nos asegura la victoria. La confianza en Dios nos da la fortaleza para superar cualquier desafío.

“Caerán a tu lado milY diez mil a tu diestraMas a ti no llegará”

— Salmos 91:7

El versículo bíblico Salmo 91:7 dice: “Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará.” Este pasaje resalta la protección divina que Dios ofrece a quienes confían en Él. En el contexto de enemigos derrotados, este versículo asegura que, aunque las amenazas sean numerosas y poderosas, no afectarán al creyente. Es un recordatorio del poder y la seguridad que provienen de la fe y de la intervención divina en momentos de peligro.

“Un varón de vosotros perseguirá a mil; porque Jehová vuestro Dios es quien pelea por vosotros, como él os dijo”

— Josué 23:10

El versículo Joshua 23:10 resalta el poder y la protección que Dios ofrece a su pueblo frente a sus enemigos. En este pasaje, se enfatiza que con la ayuda divina, un solo individuo puede poner en fuga a mil enemigos, subrayando la idea de que la verdadera fortaleza y victoria provienen de Dios. Este versículo sirve como recordatorio de la fidelidad de Dios y su capacidad para derrotar a cualquier adversario, asegurando que aquellos que confían en Él no deben temer a sus enemigos.

“En Dios haremos proezasY él hollará a nuestros enemigos”

— Salmos 60:12

El versículo de Salmos 60:12 nos ofrece una poderosa afirmación de confianza en la victoria sobre nuestros enemigos a través de la intervención divina. Este pasaje subraya que, aunque enfrentemos adversidades, es con la ayuda de Dios que podemos superar cualquier desafío. La frase “con Dios haremos proezas” resalta que el éxito no proviene de nuestras propias fuerzas, sino de la fortaleza y el respaldo que Dios proporciona. Este versículo inspira fe y esperanza, recordándonos que con Dios, los enemigos pueden ser derrotados.

“A no haber estado Jehová por nosotrosCuando se levantaron contra nosotros los hombres”

— Salmos 124:2

El versículo de Salmo 124:2 dice: “Si no hubiera sido Jehová quien estuvo por nosotros, cuando se levantaron contra nosotros los hombres”. Este versículo resalta la protección divina frente a los enemigos. Nos recuerda que, sin la intervención de Dios, nuestros adversarios podrían prevalecer. Es un testimonio de la fidelidad y el poder de Dios para salvarnos de cualquier amenaza, destacando la importancia de confiar en Él para superar las adversidades y ver a los enemigos derrotados.

“Mas los impíos pereceránY los enemigos de Jehová como la grasa de los carnerosSerán consumidos; se disiparán como el humo”

— Salmos 37:20

El versículo de Salmos 37:20 dice: “Pero los impíos perecerán, y los enemigos del Señor serán como la grasa de los corderos; desaparecerán, se disiparán como el humo”. Este pasaje resalta la certeza de la derrota de aquellos que se oponen a Dios. Asegura a los creyentes que, aunque los malvados puedan prosperar temporalmente, su destino final es la desaparición. Dios promete justicia y la derrota definitiva de todos sus enemigos, ofreciendo consuelo y esperanza a quienes confían en Él.

“Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamareEsto sé, que Dios está por mí”

— Salmos 56:9

El Salmo 56:9 dice: “Entonces mis enemigos retrocederán el día en que yo clame; esto sé, que Dios está de mi parte.” Este versículo refleja la confianza del salmista en que Dios escucha sus oraciones y actúa a su favor. A pesar de la amenaza de sus enemigos, el salmista está seguro de que Dios intervendrá y les hará retroceder. Es un poderoso recordatorio de que, con Dios a nuestro lado, incluso los enemigos más formidables pueden ser derrotados.

“He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados confundidos; serán como nada perecerán los que contienden contigo”

— Isaías 41:11

Isaías 41:11 asegura a los creyentes que aquellos que se oponen a ellos serán derrotados y deshonrados. Este versículo ofrece consuelo y confianza en la protección y justicia de Dios. Al enfrentar adversidades, los fieles pueden encontrar paz al saber que sus enemigos no prevalecerán. En el contexto de la Biblia, el mensaje reitera la soberanía de Dios sobre toda situación, recordando a los creyentes que Él está con ellos y que sus enemigos serán finalmente vencidos.

“Perseguiré a mis enemigos, los destruiréno volveré hasta acabarlos”

— 2 Samuel 22:38

2 Samuel 22:38 dice: “Perseguí a mis enemigos y los destruí; no volví hasta acabarlos”. Este versículo refleja la victoria y el triunfo sobre los adversarios, resaltando la fortaleza y determinación que provienen de la fe en Dios. David, el autor, atribuye su éxito a la intervención divina, mostrando cómo la confianza en Dios permite superar obstáculos y derrotar enemigos. Es un recordatorio poderoso de que, con la ayuda divina, es posible enfrentar cualquier desafío y salir victorioso.

“Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarásContra la ira de mis enemigos extenderás tu manoY me salvará tu diestra”

— Salmos 138:7

El versículo de Salmo 138:7 destaca la protección y fortaleza que Dios ofrece en medio de la adversidad. Aun cuando uno se encuentra rodeado por enemigos, el salmista confía en que Dios preservará su vida y lo librará de sus adversarios. Este pasaje refleja la certeza de que, con la ayuda divina, los enemigos serán derrotados. Es un recordatorio poderoso del amparo constante de Dios y de su capacidad para brindar paz y seguridad en tiempos de dificultad.

“Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé”

— Josué 1:5

El versículo Joshua 1:5 dice: “Nadie podrá hacerte frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te desampararé.” Este versículo es una poderosa promesa de Dios a Josué, asegurándole que, al igual que con Moisés, Su presencia y apoyo estarán siempre con él. En el contexto de enemigos derrotados, este versículo refuerza la idea de que con la ayuda divina, ningún enemigo podrá prevalecer contra aquellos que cuentan con la protección y guía de Dios.

“Mirarán mis ojos sobre mis enemigosOirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos”

— Salmos 92:11

El Salmo 92:11 dice: “Mis ojos han visto la derrota de mis enemigos; mis oídos han oído la rendición de mis adversarios”. Este versículo refleja la confianza en la justicia y protección divina. El salmista celebra la victoria sobre sus enemigos, reconociendo que es Dios quien le concede el triunfo. En el contexto de la fe, se interpreta como una afirmación de que, con la ayuda de Dios, uno puede superar las adversidades y observar cómo aquellos que se oponen finalmente son vencidos.

“Levántese Dios, sean esparcidos sus enemigosY huyan de su presencia los que le aborrecen”

— Salmos 68:1

El versículo de Salmos 68:1 dice: “Levántese Dios, sean esparcidos sus enemigos, y huyan de su presencia los que lo aborrecen.” Este versículo evoca la imagen poderosa de Dios alzándose para proteger a su pueblo, asegurando que los adversarios sean derrotados y dispersados. Refleja la confianza en el poder divino para vencer el mal y la injusticia. En el contexto de enemigos derrotados, destaca la certeza de que con Dios, la victoria está asegurada y los enemigos no prevalecerán.

“Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores mis enemigosPara comer mis carnes, ellos tropezaron cayeron”

— Salmos 27:2

El versículo de Salmo 27:2 dice: “Cuando se acercaron contra mí los malhechores, mis adversarios y mis enemigos, para devorar mis carnes, ellos tropezaron y cayeron”. Este pasaje resalta la protección divina frente a los enemigos. A pesar de las amenazas y agresiones, Dios asegura la derrota de los adversarios. Refleja la confianza del creyente en la intervención divina, ilustrando cómo los planes de los malhechores fallan cuando Dios está de su lado, ofreciendo así consuelo y fortaleza.

“Pero si en verdad oyeres su voz hicieres todo lo que yo te dijere, seré enemigo de tus enemigos, afligiré a los que te afligieren”

— Éxodo 23:22

Éxodo 23:22 dice: “Pero si en verdad escuchas su voz e haces todo lo que te diga, seré enemigo de tus enemigos y adversario de tus adversarios.” Este versículo enfatiza la protección y el respaldo divino que Dios ofrece a aquellos que obedecen Su voz y siguen Sus mandamientos. En el contexto de enemigos derrotados, subraya que la fidelidad a Dios transforma a nuestros enemigos en enemigos de Dios, asegurando que Él luchará por nosotros y vencerá cualquier adversidad que enfrentemos en Su nombre.

“Jehová dijo a mi SeñorSiéntate a mi diestraHasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies”

— Salmos 110:1

El Salmo 110:1 es un versículo poderoso que destaca la autoridad y el triunfo de Dios sobre Sus enemigos. En este pasaje, el Señor invita a Su ungido a sentarse a Su derecha, simbolizando un lugar de honor y victoria. La imagen de poner a los enemigos como estrado de Sus pies representa la derrota completa de aquellos que se oponen a Su voluntad. Este versículo resalta la soberanía divina y la certeza de que Dios prevalecerá sobre el mal, ofreciendo esperanza y confianza a los creyentes.

“Perseguiréis a vuestros enemigos, caerán a espada delante de vosotros”

— Levítico 26:7

Levítico 26:7 dice: “Perseguiréis a vuestros enemigos, y caerán a espada delante de vosotros”. Este versículo refleja la promesa de victoria para el pueblo de Dios cuando obedecen sus mandamientos. En el contexto de los enemigos derrotados, resalta que la fidelidad a Dios trae protección y éxito en las batallas. La imagen de los enemigos cayendo a espada simboliza la derrota total frente a la justicia divina, subrayando la confianza en el poder de Dios para superar cualquier adversidad.

“Así perezcan todos tus enemigos, oh JehováMas los que te aman, sean como el sol cuando sale en su fuerzaY la tierra reposó cuarenta años”

— Jueces 5:31

Jueces 5:31 es parte del cántico de Débora y Barac, que celebra la victoria de Israel sobre sus enemigos. El versículo dice: “Así perezcan todos tus enemigos, oh Señor; pero los que te aman sean como el sol cuando sale en su fuerza.” Este versículo enfatiza la justicia divina, donde los enemigos de Dios son derrotados, mientras que aquellos que lo aman prosperan. Refleja la confianza en que Dios protege a los suyos y asegura la derrota de las fuerzas opuestas.

“Mis enemigos volvieron atrásCayeron perecieron delante de ti”

— Salmos 9:3

El versículo de Salmo 9:3 dice: “Mis enemigos retroceden, caen y perecen delante de ti”. Este versículo refleja la confianza del salmista en la justicia y el poder de Dios para derrotar a los enemigos. En el contexto del tema “Versículos de la Biblia sobre enemigos derrotados”, este pasaje subraya la protección divina y la victoria que Dios asegura a aquellos que confían en Él. Nos recuerda que, frente a la adversidad, podemos encontrar esperanza y seguridad en la intervención divina.

“El Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros”

— Romanos 16:20

Romanos 16:20 dice: “Y el Dios de paz aplastará pronto a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.” Este versículo ofrece una promesa de victoria sobre los enemigos espirituales. Dios, fuente de paz, asegura que el poder del mal, representado por Satanás, será derrotado. Este mensaje brinda esperanza y fortaleza a los creyentes, recordándoles que la gracia de Jesucristo está con ellos y que el triunfo sobre las fuerzas adversas es inminente.

“Pues me ceñiste de fuerzas para la peleaHas humillado a mis enemigos debajo de mí”

— Salmos 18:39

El versículo de Salmo 18:39 dice: “Porque tú me ceñiste de fuerza para la batalla; has sometido a mis enemigos debajo de mí.” Este pasaje resalta cómo Dios otorga fuerza y poder a sus fieles para vencer a sus adversarios. En el contexto de los versículos de la Biblia sobre enemigos derrotados, este versículo muestra la dependencia del creyente en la fortaleza divina para superar obstáculos y experimentar victoria sobre las fuerzas que se oponen a ellos. Dios es presentado como un aliado poderoso que garantiza el triunfo.

“Salvación de nuestros enemigos, de la mano de todos los que nos aborrecieron”

— Lucas 1:71

Lucas 1:71 habla de la salvación y la liberación que Dios promete a su pueblo, específicamente de ser rescatados de sus enemigos y de aquellos que los odian. Este versículo forma parte del cántico de Zacarías, quien profetiza el papel de su hijo Juan el Bautista en preparar el camino para Jesús. La promesa de Dios de derrotar a los enemigos es un tema recurrente en la Biblia, simbolizando tanto la liberación física como espiritual, y mostrando la fidelidad de Dios hacia sus promesas.

“En Dios haremos proezasY él hollará a nuestros enemigos”

— Salmos 108:13

El versículo bíblico de Salmo 108:13 dice: “Con Dios haremos proezas, y él pisoteará a nuestros enemigos”. Este versículo transmite un mensaje de confianza y victoria. Al confiar en Dios, los creyentes pueden superar cualquier adversidad. Dios es representado como el guerrero supremo que asegura la derrota de los enemigos. Este pasaje inspira fe y valentía, recordando que con la ayuda divina, ninguna amenaza es insuperable y nuestros enemigos serán vencidos.

“Acontecerá en aquel tiempo que su carga será quitada de tu hombro, su yugo de tu cerviz, el yugo se pudrirá a causa de la unción”

— Isaías 10:27

Isaías 10:27 habla sobre la liberación del pueblo de Dios de la opresión de sus enemigos. Este versículo promete que el yugo que pesa sobre ellos será destruido a causa de la unción. En el contexto de los enemigos derrotados, este pasaje destaca cómo el poder divino rompe las cadenas y libera a los oprimidos. La unción representa la presencia de Dios que otorga libertad y victoria sobre cualquier fuerza adversa, asegurando que los enemigos no prevalecerán frente a Su intervención.

“Mi enemiga lo verá, la cubrirá vergüenza; la que me decía: ¿Dónde está Jehová tu Dios? Mis ojos la verán; ahora será hollada como lodo de las calles”

— Miqueas 7:10

Miqueas 7:10 habla sobre la vindicación de aquellos que confían en Dios frente a sus enemigos. El versículo describe cómo los adversarios que desafiaron y cuestionaron la presencia del Señor verán su caída y vergüenza. Este pasaje refleja el tema de la justicia divina y cómo Dios defiende a su pueblo, demostrando que Él es su protector y juez. Los enemigos derrotados se convierten en un testimonio del poder y la fidelidad de Dios hacia aquellos que permanecen firmes en su fe.

“Jehová vuestro Dios, el cual va delante de vosotros, él peleará por vosotros, conforme a todas las cosas que hizo por vosotros en Egipto delante de vuestros ojos”

— Deuteronomio 1:30

Deuteronomio 1:30 dice: “Jehová vuestro Dios, que va delante de vosotros, él peleará por vosotros, conforme a todas las cosas que hizo por vosotros en Egipto delante de vuestros ojos.” Este versículo nos recuerda que Dios es quien lucha nuestras batallas y derrota a nuestros enemigos. Al igual que en el pasado, cuando liberó a los israelitas de Egipto, Dios promete estar con nosotros y pelear a nuestro favor. Nos anima a confiar en su poder y protección, asegurándonos de que no estamos solos en nuestras luchas.

“Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada”

— Jeremías 20:11

Jeremías 20:11 dice: “Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión, que jamás será olvidada.” Este versículo destaca la protección y fortaleza divina frente a los enemigos. Nos recuerda que, con Dios a nuestro lado, no debemos temer a los adversarios, ya que Él garantiza su derrota y humillación, asegurando nuestra victoria y paz.

“Sabrá toda esta congregación que Jehová no salva con espada con lanza; porque de Jehová es la batalla, él os entregará en nuestras manos”

— 1 Samuel 17:47

1 Samuel 17:47 destaca la confianza en el poder de Dios para vencer a los enemigos. El versículo dice que “la batalla es del Señor”, subrayando que no es por fuerza humana, sino por la intervención divina que se logran las victorias. En el contexto de David y Goliat, muestra cómo Dios puede derrotar a enemigos aparentemente invencibles. Este pasaje inspira fe y tranquilidad, recordando a los creyentes que, sin importar cuán grandes sean los desafíos, Dios está con ellos y es quien otorga la victoria.

“Sino que quebrantaré delante de él a sus enemigosY heriré a los que le aborrecen”

— Salmos 89:23

El versículo de Salmo 89:23 dice: “Aplastaré a sus adversarios delante de él y heriré a los que lo odian”. Este pasaje resalta la promesa de protección y victoria divina contra los enemigos. El salmista expresa la certeza de que Dios intervendrá a favor de su pueblo, asegurando que aquellos que se oponen serán derrotados. Este versículo ofrece consuelo y confianza en la justicia divina, subrayando que Dios es un defensor poderoso que garantiza la derrota de los adversarios.

“El hombre deslenguado no será firme en la tierraEl mal cazará al hombre injusto para derribarle”

— Salmos 140:11

El versículo de Salmo 140:11 aborda la justicia divina contra aquellos que actúan con maldad y opresión. Este pasaje resalta la confianza en que Dios no permitirá que los malvados prosperen indefinidamente. En el contexto de “enemigos derrotados”, este versículo nos recuerda que, aunque enfrentemos adversidades y enemigos en la vida, la justicia de Dios prevalecerá. Es un llamado a mantener la fe y confiar en que Dios defenderá a los justos y actuará contra la maldad.

“Cuando oyeron nuestros enemigos que lo habíamos entendido, que Dios había desbaratado el consejo de ellos, nos volvimos todos al muro, cada uno a su tarea”

— Nehemías 4:15

Nehemías 4:15 destaca el momento en que los enemigos de los israelitas, al darse cuenta de que Dios frustró sus planes, abandonaron su intención de atacar. Este versículo refleja el poder de la intervención divina en la protección de su pueblo. En el contexto de enemigos derrotados, subraya la importancia de la fe y la vigilancia, mostrando que, aunque haya adversarios, Dios puede desbaratar sus planes y asegurar la victoria para aquellos que confían en Él.

“Yo enviaré mi terror delante de ti, consternaré a todo pueblo donde entres, te daré la cerviz de todos tus enemigos”

— Éxodo 23:27

Éxodo 23:27 dice: “Enviaré mi terror delante de ti, y consternaré a todo pueblo donde entres, y te daré la espalda de todos tus enemigos.” Este versículo es una promesa de Dios a los israelitas, asegurándoles que Él mismo irá delante de ellos para derrotar a sus enemigos. Refleja cómo Dios actúa como protector y garante de la victoria para su pueblo, instando a la confianza en Su poder. En contextos actuales, este versículo puede inspirar seguridad en la protección divina frente a las adversidades.