29 Versículos de la Biblia sobre hermanos peleando y traición

“Dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo. aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, lo mató”

— Génesis 4:8

Génesis 4:8 narra el momento en que Caín, consumido por la envidia y el resentimiento, invita a su hermano Abel al campo y lo mata. Este trágico episodio es el primer relato bíblico de traición y violencia entre hermanos. Ilustra cómo los celos y el odio pueden destruir relaciones familiares, y sirve como una advertencia sobre las consecuencias devastadoras de permitir que tales emociones dominen el corazón. La historia de Caín y Abel nos invita a reflexionar sobre la importancia del perdón y el amor fraternal.

“Aborreció Esaú a Jacob por la bendición con que su padre le había bendecido, dijo en su corazón: Llegarán los días del luto de mi padre, yo mataré a mi hermano Jacob”

— Génesis 27:41

Génesis 27:41 narra el momento en que Esaú siente un profundo rencor hacia su hermano Jacob por haberle robado la bendición paterna. Esaú planea vengarse, lo que ilustra el dolor y la traición entre hermanos. Este versículo refleja cómo la envidia y el engaño pueden romper lazos familiares y sembrar discordia. La historia de Esaú y Jacob es un recordatorio de las consecuencias de las rivalidades y la necesidad de buscar la reconciliación y el perdón en las relaciones familiares.

“Viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos sus hermanos, le aborrecían, no podían hablarle pacíficamente”

— Génesis 37:4

Génesis 37:4 relata cómo los hermanos de José, llenos de envidia, lo odiaban y no podían hablarle pacíficamente. Este versículo ilustra el doloroso tema de la rivalidad y traición entre hermanos, destacando cómo los celos pueden romper los lazos familiares. La preferencia de Jacob por José, simbolizada por la túnica de colores, intensificó estos sentimientos negativos. Esta historia es un recordatorio de las consecuencias destructivas de la envidia y la falta de comunicación en las relaciones fraternas.

“Cuando ellos lo vieron de lejos, antes que llegara cerca de ellos, conspiraron contra él para matarle”

— Génesis 37:18

Génesis 37:18 relata cómo los hermanos de José, guiados por la envidia y el resentimiento, conspiran para hacerle daño al verlo acercarse. Este versículo ilustra el tema de la traición fraternal, mostrando cómo los celos pueden romper los lazos familiares. La historia de José y sus hermanos es un ejemplo poderoso de cómo la discordia y la falta de amor pueden llevar a actos de traición, pero también apunta hacia la posibilidad de redención y reconciliación más adelante.

“Cuando pasaban los madianitas mercaderes, sacaron ellos a José de la cisterna, le trajeron arriba, le vendieron a los ismaelitas por veinte piezas de plata. llevaron a José a Egipto”

— Génesis 37:28

Génesis 37:28 narra el momento en que los hermanos de José, impulsados por la envidia y el rencor, lo venden a unos mercaderes ismaelitas por veinte piezas de plata. Este acto de traición subraya el dolor y la división que pueden surgir dentro de una familia debido a los celos. Sin embargo, también es el comienzo de la historia de redención y reconciliación, ya que, a pesar de este acto tan doloroso, el plan de Dios para José se cumple, transformando el sufrimiento en salvación para su familia.

“Viniendo a la casa de su padre en Ofra, mató a sus hermanos los hijos de Jerobaal, setenta varones, sobre una misma piedra; pero quedó Jotam el hijo menor de Jerobaal, que se escondió”

— Jueces 9:5

Jueces 9:5 narra un episodio oscuro en la historia de Israel, donde Abimelec asesina a setenta de sus hermanos para consolidar su poder. Este acto de traición y fratricidio resalta el peligro de la ambición desmedida y la ruptura de lazos familiares. El versículo ilustra cómo la lucha por el poder puede llevar a la traición entre hermanos, un tema recurrente en la Biblia que advierte sobre las consecuencias devastadoras de la rivalidad y la deslealtad.

“Absalón había dado orden a sus criados, diciendo: Os ruego que miréis cuando el corazón de Amnón esté alegre por el vino; al decir yo: Herid a Amnón, entonces matadle, no temáis, pues yo os lo he mandado. Esforzaos, pues, sed valientes. los criados de Absalón hicieron con Amnón como Absalón les había mandado. Entonces se levantaron todos los hijos del rey, montaron cada uno en su mula, huyeron”

— 2 Samuel 13:28-29

El pasaje de 2 Samuel 13:28-29 relata el momento en que Absalón, hijo del rey David, ordena a sus sirvientes matar a su medio hermano Amnón durante un banquete. Este acto de traición y violencia surge de la venganza de Absalón por la violación de su hermana Tamar por parte de Amnón. Este episodio resalta el dolor y la destrucción que pueden surgir de la traición y los conflictos entre hermanos, mostrando cómo la falta de perdón y reconciliación puede llevar a la tragedia familiar.

“De esta manera hacía con todos los israelitas que venían al rey a juicio; así robaba Absalón el corazón de los de Israel”

— 2 Samuel 15:6

2 Samuel 15:6 describe cómo Absalón se ganaba el favor de los israelitas, traicionando a su padre, el rey David. Absalón se presentaba como un juez justo y accesible, robándose los corazones del pueblo. Este versículo ilustra la traición y el conflicto entre hermanos, ya que Absalón, en su ambición, socava la autoridad de David. Refleja cómo las divisiones familiares pueden llevar a la traición y cómo las ambiciones personales pueden romper lazos sagrados, sirviendo como advertencia sobre las consecuencias del engaño y la deslealtad.

“Entonces el rey se turbó, subió a la sala de la puerta, lloró; yendo, decía así: ¡Hijo mío Absalón, hijo mío, hijo mío Absalón! ¡Quién me diera que muriera yo en lugar de ti, Absalón, hijo mío, hijo mío”

— 2 Samuel 18:33

2 Samuel 18:33 refleja el profundo dolor del rey David por la muerte de su hijo Absalón, quien se rebeló contra él. Este versículo destaca el impacto emocional de la traición y el conflicto entre familiares. David llora amargamente, mostrando que, a pesar de la traición y la lucha, el amor por su hijo prevalece. Esta historia ilustra las complejidades de las relaciones familiares y la devastación que los conflictos internos pueden causar, resonando con el tema de hermanos peleando y traición.

“Entonces el rey Salomón envió por mano de Benaía hijo de Joiada, el cual arremetió contra él, murió”

— 1 Reyes 2:25

1 Reyes 2:25 relata cómo el rey Salomón ordena la ejecución de Adonías a manos de Benaía. Este versículo se enmarca en un contexto de traición y lucha por el poder entre hermanos, ya que Adonías había intentado usurpar el trono de su hermano Salomón. La historia refleja las complejidades de las relaciones familiares y las consecuencias de las ambiciones desmedidas. A través de este relato, se pone de manifiesto cómo la traición y el conflicto entre hermanos pueden llevar a desenlaces trágicos.

“Jehová hará volver su sangre sobre su cabeza; porque él ha dado muerte a dos varones más justos mejores que él, a los cuales mató a espada sin que mi padre David supiese nada: a Abner hijo de Ner, general del ejército de Israel, a Amasa hijo de Jeter, general del ejército de Judá. La sangre, pues, de ellos recaerá sobre la cabeza de Joab, sobre la cabeza de su descendencia para siempre; mas sobre David sobre su descendencia, sobre su casa sobre su trono, habrá perpetuamente paz de parte de Jehová”

— 1 Reyes 2:32-33

1 Reyes 2:32-33 aborda las acciones traicioneras de Joab, quien derramó sangre inocente al asesinar a Abner y Amasa, generando un legado de culpa sobre él y su descendencia. Este pasaje refleja cómo la traición y el conflicto entre hermanos pueden tener consecuencias duraderas. En el contexto de la Biblia, subraya la importancia de la justicia y la retribución divina, destacando que las acciones traicioneras no quedan impunes, afectando tanto al traidor como a sus generaciones futuras.

“Porque no me afrentó un enemigoLo cual habría soportadoNi se alzó contra mí el que me aborrecíaPorque me hubiera ocultado de élSino tú, hombre, al parecer íntimo míoMi guía, mi familiarQue juntos comunicábamos dulcemente los secretosY ábamos en amistad en la casa de Dios”

— Salmos 55:12-14

El pasaje de Salmo 55:12-14 refleja el dolor profundo de la traición por parte de alguien cercano, comparándolo con el sufrimiento que causaría un enemigo. El salmista expresa su angustia al ser traicionado por un amigo íntimo, alguien con quien compartía momentos de comunión y adoración. Este versículo es un recordatorio de que las heridas más profundas a menudo provienen de aquellos en quienes más confiamos, resaltando la vulnerabilidad en las relaciones cercanas y la necesidad de perdón y reconciliación.

“El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerteY las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar”

— Proverbios 18:19

Proverbios 18:19 dice: “El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte, y las contiendas son como los cerrojos de un castillo.” Este versículo refleja la dificultad de reparar las relaciones rotas entre hermanos después de una traición o conflicto. Las ofensas pueden crear barreras emocionales tan resistentes como una fortaleza. Nos recuerda la importancia de la reconciliación y el perdón para restaurar vínculos familiares, destacando lo fácil que es romper la confianza y lo arduo que es reconstruirla.

“Cruel es la ira, impetuoso el furorMas ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?”

— Proverbios 27:4

Proverbios 27:4 dice: “Cruel es la ira e impetuoso el furor, pero ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?” Este versículo subraya la intensidad destructiva de la envidia, comparándola con la ira y el furor. En el contexto de hermanos peleando y traición, la envidia puede ser una fuerza divisiva que rompe lazos familiares. Mientras que la ira puede ser pasajera, la envidia puede persistir y causar un daño duradero, erosionando la confianza y el amor entre hermanos.

“Oíd palabra de Jehová, vosotros los que tembláis a su palabra: Vuestros hermanos que os aborrecen, os echan fuera por causa de mi nombre, dijeron: Jehová sea glorificado. Pero él se mostrará para alegría vuestra, ellos serán confundidos”

— Isaías 66:5

Isaías 66:5 aborda el tema de la prueba y el sufrimiento que enfrentan los fieles a manos de aquellos que deberían ser sus hermanos. El versículo destaca cómo algunos, en su supuesta devoción, traicionan y persiguen a los que verdaderamente siguen a Dios. Esta traición puede resonar con el dolor de los conflictos entre hermanos, recordándonos que incluso en momentos de deslealtad, Dios escucha a los justos y promete vindicación y consuelo a quienes permanecen fieles a Él.

“Porque aun tus hermanos la casa de tu padre, aun ellos se levantaron contra ti, aun ellos dieron grito en pos de ti. No los creas cuando bien te hablen”

— Jeremías 12:6

Jeremías 12:6 aborda la traición y el conflicto entre hermanos. En este versículo, Dios le advierte a Jeremías que incluso sus propios familiares y hermanos lo han traicionado y conspirado contra él. Este pasaje resalta la dolorosa realidad de que las traiciones pueden venir de personas cercanas, desafiándonos a mantener la fe y buscar la guía divina en medio de tales pruebas. Es un recordatorio de que la lealtad y la confianza pueden ser quebrantadas, incluso en la familia, pero también una invitación a la resiliencia espiritual.

“Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra, los enemigos del hombre son los de su casa”

— Miqueas 7:6

Miqueas 7:6 describe un escenario de conflicto y traición dentro de la familia: “Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra su madre, la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre son los de su casa”. Este versículo refleja la ruptura de los lazos familiares y la traición entre hermanos, subrayando la tensión y el dolor que pueden surgir en las relaciones más cercanas. En un contexto más amplio, invita a reflexionar sobre la importancia de la reconciliación y el perdón en las relaciones familiares.

“El hermano entregará a la muerte al hermano, el padre al hijo; los hijos se levantarán contra los padres, los harán morir”

— Mateo 10:21

Mateo 10:21 dice: “El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres y los harán morir.” Este versículo aborda el doloroso tema de la traición familiar, que puede surgir incluso en los vínculos más cercanos. Jesús advierte a sus discípulos sobre las divisiones y conflictos que pueden surgir a causa de su fe. Es una llamada a estar preparados para enfrentar situaciones difíciles y mantener la integridad y la fe, incluso en medio de la traición y el conflicto familiar.

“Los enemigos del hombre serán los de su casa”

— Mateo 10:36

Mateo 10:36 dice: “y los enemigos del hombre serán los de su propia casa.” Este versículo refleja una advertencia de Jesús sobre las divisiones y conflictos que pueden surgir incluso entre los miembros más cercanos de la familia. Habla de las tensiones y traiciones que pueden ocurrir cuando las personas eligen seguir caminos diferentes, especialmente en el contexto de la fe. Jesús indica que su mensaje puede ser una fuente de discordia, trayendo a menudo conflicto entre hermanos y seres queridos.

“Mas seréis entregados aun por vuestros padres, hermanos, parientes, amigos; matarán a algunos de vosotros”

— Lucas 21:16

Lucas 21:16 dice: “Mas seréis entregados aun por vuestros padres, y hermanos, y parientes, y amigos; y matarán a algunos de vosotros.” Este versículo refleja la profunda realidad de la traición y el conflicto incluso entre los lazos más cercanos, como la familia y los amigos. En el contexto de las enseñanzas de Jesús, se advierte a sus seguidores sobre las pruebas y persecuciones que enfrentarán por causa de su fe. Este pasaje resalta la fortaleza espiritual necesaria para perseverar incluso cuando enfrentamos traición de aquellos que amamos.

“Habiendo dicho Jesús esto, se conmovió en espíritu, declaró dijo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar”

— Juan 13:21

El versículo de Juan 13:21 narra un momento de gran tensión y tristeza durante la Última Cena, cuando Jesús revela que uno de sus discípulos lo traicionará. Este pasaje ilustra el dolor de la traición, especialmente entre aquellos considerados hermanos cercanos. En el contexto de las peleas y traiciones entre hermanos, este versículo resalta la vulnerabilidad y el sufrimiento que surgen cuando la confianza se rompe en relaciones profundas, recordándonos la importancia del perdón y la reconciliación.

“Después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo más pronto”

— Juan 13:27

Juan 13:27 dice: “Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: ‘Lo que vas a hacer, hazlo pronto'”. Este versículo se refiere al momento en que Judas Iscariote decide traicionar a Jesús, lo que destaca el tema de la traición. En el contexto de hermanos peleando, refleja cómo la traición y el conflicto pueden surgir incluso entre los más cercanos. Es un recordatorio de la fragilidad de las relaciones humanas y la importancia de la lealtad y el perdón.

“También Judas, el que le entregaba, conocía aquel lugar, porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos. Judas, pues, tomando una compañía de soldados, alguaciles de los principales sacerdotes de los fariseos, fue allí con linternas antorchas, con armas”

— Juan 18:2-3

Juan 18:2-3 describe el momento en que Judas Iscariote traiciona a Jesús, guiando a los soldados y oficiales al huerto de Getsemaní para arrestarlo. Este acto de traición por parte de uno de sus propios discípulos refleja el dolor y la deslealtad que pueden surgir incluso entre aquellos que están más cerca de nosotros, como hermanos. El versículo resalta la vulnerabilidad de las relaciones humanas y la tristeza profunda que acompaña a la traición, un tema relevante en la vida de muchas personas.

“Los patriarcas, movidos por envidia, vendieron a José para Egipto; pero Dios estaba con él”

— Hechos 7:9

Hechos 7:9 narra cómo los patriarcas, movidos por la envidia, vendieron a José a Egipto. Este versículo ilustra el dolor y la traición entre hermanos, un tema recurrente en las Escrituras. A pesar de la traición, el relato de José muestra cómo Dios puede transformar el dolor en propósito, convirtiendo la traición en una vía para el cumplimiento de Su plan. La historia resalta la importancia del perdón y la reconciliación, incluso en medio de las rivalidades más profundas.

“Hubo tal desacuerdo entre ellos, que se separaron el uno del otro; Bernabé, tomando a Marcos, navegó a Chipre”

— Hechos 15:39

Hechos 15:39 relata un desacuerdo entre Pablo y Bernabé que llevó a su separación. Este versículo ilustra cómo incluso los líderes espirituales pueden enfrentar conflictos y desacuerdos. En el contexto de hermanos peleando y traición, muestra que las diferencias pueden surgir incluso entre personas cercanas y con objetivos comunes. Sin embargo, también resalta la posibilidad de continuar con el trabajo del ministerio por caminos separados, sugiriendo que los conflictos no siempre impiden el cumplimiento de propósitos más grandes.

“Pero si os mordéis os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros”

— Gálatas 5:15

Gálatas 5:15 advierte sobre las consecuencias destructivas de las disputas y divisiones entre hermanos. El versículo dice: “Pero si os mordéis y os devoráis unos a otros, tened cuidado de no ser consumidos unos por otros.” Esta metáfora destaca cómo las peleas y traiciones pueden desgarrar comunidades y relaciones. En el contexto de hermanos peleando, este versículo recuerda la importancia de la unidad y el amor fraternal, advirtiendo que el conflicto puede llevar a la destrucción mutua si no se maneja con cuidado y compasión.

“¿De dónde vienen las guerras los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?”

— Santiago 4:1

Santiago 4:1 aborda la fuente de los conflictos y las disputas entre las personas, señalando que provienen de las pasiones y deseos egoístas que luchan dentro de cada uno. En el contexto de hermanos peleando y traición, este versículo nos invita a reflexionar sobre cómo nuestras propias ambiciones y deseos no satisfechos pueden causar fricciones y rupturas en las relaciones. Nos recuerda la importancia de la introspección y la búsqueda de la paz interior para fomentar la armonía con los demás.

“No como Caín, que era del maligno mató a su hermano. ¿por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, las de su hermano justas”

— 1 Juan 3:12

1 Juan 3:12 nos recuerda el ejemplo de Caín, quien traicionó y mató a su hermano Abel debido a la envidia y la maldad en su corazón. Este versículo ilustra cómo el odio y la falta de amor entre hermanos pueden llevar a la traición y la violencia. A través de este relato, se nos advierte sobre los peligros de permitir que sentimientos negativos dominen nuestras acciones. En el contexto de hermanos que pelean, se nos insta a seguir el camino del amor y la reconciliación.